La capacidad de control remoto es otro beneficio clave de un sistema BMS centralizado. Con acceso desde cualquier ubicación con conexión a internet, los administradores pueden ajustar la configuración de los sistemas en tiempo real, responder rápidamente a las condiciones cambiantes del edificio y realizar diagnósticos y solucionar problemas sin necesidad de estar físicamente presentes en el lugar.

Esto no solo ahorra tiempo y recursos, sino que también permite una respuesta más rápida a situaciones de emergencia, como fallas en los sistemas de seguridad o eventos climáticos extremos.